Sistema penitenciario en México (derechos humanos de los reos)

Abstract

Cuando hablamos de readaptación o resocialización siempre nos indican lugar, tiempo y pago a la sociedad por algún delito cometido. Lugar, el centro penitenciario; tiempo, el que se ocupará para realizar la readaptación; y, el pago a la sociedad, la sentencia que se le asigne al delincuente. El primer capítulo trata de los antecedentes históricos que en tiempos remotos se tiene ya existían lugares específicos para castigar a quienes infringían alguna de las reglas, leyes o decretos que se tenían establecida para que las personas pagaran por sus delitos o simplemente para castigar a las personas que los gobernantes de esos tiempos consideraban que tenían que ser sometidos no solo por haber cometido delitos o por simple uso de poder. También trata de que en los últimos años los sistemas se han aplicado en forma estandarizada para todos los internos de las instituciones penitenciarias. En el segundo capítulo se trata de la llegada de los reos a los centros penitenciarios en los cuales se establece que no se les recibirá de manera amable y amigables ya se supone que estos están en ese lugar por haber cometido un delito ante la sociedad y que tiene que resarcir el daño, desde aquí en piensan ya los roces pues son sometidos a revisión muy fuertes y los obligar a permanecer horas parados y en una sola posición, también se comenta sobre la integración real de lo que debe de contener un expediente del reo, que van desde los datos generales, antecedentes pedagógicos, vida delictiva, examen médico, notas psíquicas, personalidad, naturaleza de criminalidad y peligrosidad. En el capítulo tercero y cuarto se comenta sobre el modelo de disciplina y la incorporación del reo en la vida cotidiana las pocas variantes que se encuentran y sí muchas críticas, las que se tienen de los centros, desde aquellas que manifiestan que no sirve para nada y que no es cierto que se pueda reinsertar a un ex convicto o ex presidiario en la sociedad, como las que magnifican los resultados positivos pero difíciles de comprobar. Podernos confirmar que se encuentran los internos y algunos externos medio readaptados al medio social. Tradicionalmente se ha determinado que cualquier tratamiento de socialización, se dice que el delincuente sale perfeccionado, desadaptado, desocializado y resentido contra la sociedad y el Estado. El capítulo quinto se destacan algunos conceptos que dicen: A quien vive en condiciones infrahumanas ¿a qué sociedad va a adaptársele?, a su sociedad que por su índole tiene un carácter marcadamente crinógeno o bien al medio social de la clase media en el que no podrá vivir por razones socioeconómicas evidentes. También destaca que: No basta ser pobre para ser criminal. Podemos añadir también que la falta de recursos materiales, personal inadecuado, corrupción y maltrato, preparan a los reos para la reincidencia. No obstante, todo ello, no estamos de acuerdo con las teorías abolicionistas, cuya tendencia de criminología radical, propone la abolición de la cárcel y de todo el sistema penal. Para los abolicionistas, la preocupación central es la pérdida de la libertad y autonomía del individuo por obra del Estado y la sociedad. Y preconizan la justicia comunitaria con reglas establecidas por los participantes. La historia nos demuestra que la comunidad puede ser más represiva y agresiva que un sistema de leyes, originándose la situación de desigualdad social para la víctima o para el delincuente. Llevándonos esto pues a que en nuestro sistema penitenciario mexicano realmente no se respetan los derechos establecidos en nuestras leyes y pactos y realmente no damos un debido tratamiento a los reos que les ayuden a integrarse a la sociedad, debido a la impunidad, corrupción existente en los Centros de Readaptación que tenemos en nuestro país.