Geoarqueología de los yacimientos de obsidiana con explotación pre-hispánica en la Sierra de las Navajas, Hidalgo, México: origen e identidad petrológica

Abstract

Sierra de las Navajas es un complejo volcánico compuesto por un paleo-estratovolcán de edad Cuaternaria, de composición riolítica y de afinidad hiperalcalina, que se caracteriza por la presencia de obsidiana de color verde. En este macizo rocoso, que se ubica al borde nororiente del Cinturón Volcánico Trans-Mexicano en el Estado de Hidalgo, se localiza el Cerro de las Navajas. En dicha área se presentan los vestigios arqueológicos de explotación de obsidiana con mayor intensidad en Mesoamérica. Desde el Formativo temprano hasta la época Colonial, la extracción de obsidiana se ejerció por las culturas del Altiplano central y las sociedades colonizadas por medio de minería subterránea y a cielo abierto. Se identificó el origen de la obsidiana en el área de explotación de Cerro de las Navajas a partir de una cartografía geológica detallada, un estudio petrográfico, y un análisis geoquímico. Esta metodología explica su ocurrencia y su ubicación en tiempo y espacio durante las etapas eruptivas del volcán. En los resultados del estudio se muestra que el yacimiento arqueológico deriva de un mecanismo eruptivo explosivo, ligado al colapso parcial de un domo de lava con obsidiana que produjo un Depósito de Flujo de Bloques y Cenizas (DFBC). Este depósito, poco soldado, se caracteriza por la presencia de líticos de obsidiana en forma de bloques que alcanzan hasta 1 m de diámetro. Los análisis petrográficos de la obsidiana permitieron distinguir dos variedades: verde-dorada y verde-obscura, que dependen de la concentración de cristales, litofisas, esferulitas y vesículas. Las obsidianas muestran una composición química global muy similar, no obstante, los cocientes Sr/Mn y Rb/Ti permiten diferenciar los eventos eruptivos ocurridos en Cerro de las Navajas. El interés por la calidad en la pureza vítrea y lo exótico de la obsidiana de Sierra de las Navajas fueron promotores de un complejo sistema de explotación desarrollado principalmente por el estado Teotihuacano, Tolteca y Azteca. El DFBC fue sepultado por eventos volcánicos posteriores, por reajustes estructurales de la Sierra, así como, por suelos derivados del intemperismo de las unidades volcánicas tobacíticas que componen la montaña. La ingeniería minera necesaria, exclusiva en la explotación de Cerro de las Navajas, es irrepetible y única en Mesoamérica.